Existen miles de artículos que hablan sobre los beneficios de crear una cultura de trabajo única en la empresa, en donde todos están conectados trabajando en función de los mismos valores y metas, sin embargo, muy poco se habla de las dificultades que implica poder implementarlo.
Desde mi experiencia lo que puedo compartir es que para iniciar cualquier cambio en la empresa, dicho cambio primero comienza con el fundador. Aunque siempre se puede contratar a un experto (dependiendo del tamaño de la empresa) que apoye en el proceso de transformación de la cultura, es fundamental primero que el fundador desarrolle habilidades tales como:

  • Mejor comunicación/ aprender a escuchar: No podemos asumir que los colaboradores nos leen el pensamiento y tampoco podemos creer que si no los escuchamos vamos a saber lo que piensan. Tenemos que desarrollar la capacidad de transmitir nuestra visión a toda la organización del tipo de empresa que queremos construir y también tenemos que desarrollar la capacidad de hablar y escuchar con cada uno de los miembros del equipo para garantizar que el mensaje quede claro. Es nuestra responsabilidad garantizar que todos entiendan.
  • Mayor empatía: Tenemos que entender que todos en una organización tenemos diferentes niveles de educación, diferentes expectativas, diferentes historias y tenemos distinta manera de ver el mundo y por tanto es fundamental desarrollar la capacidad de percibir y comprender a los demás. El mundo no sólo da vueltas alrededor del fundador.
  • Más madurez: las principales muestras de que una persona es madura son que acepta las críticas y las analiza y estudia para mejorar, que sabe controlar sus ataques de mal genio, que siempre acepta las consecuencias de sus actos sin ampararse o justificarse en excusas, que establece que nada es blanco o negro pues siempre hay un término medio.
  • Coaching: En Latino América y particularmente en Nicaragua se conoce muy poco sobre las ventajas de tener un coach empresarial. Así como es importante que el fundador reciba algún tipo de coaching en algún nivel de su vida, es fundamental que él haga lo mismo con su equipo. El debe aprender a aconsejar, guiar y servir de ejemplo en la organización. Ahora, esto no excluye que si el tamaño de la organización lo permite, se contrate a un coach certificado que apoye en el proceso.

La gerente de venta regional de una empresa fundada en los años 50 y que factura más de 300 millones de dólares al año, me comentó que hace dos años comenzaron un proceso de cambio de cultura que ha sido complicado pero que ahora el ambiente de trabajo ha mejorado tanto que todos sienten un placer al ir a trabajar. El que promovió todo este cambio fue el nieto del fundador que tiene 32 años.

Solo los emprendedores que logren transformarse ellos mismos y que sean capaces de lograr una cultura de trabajo en donde todos trabajan con determinación y disciplina, son los que van a sobrevivir cualquier obstáculo en el camino.


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